¿Qué es Smart Contract?
Imagina que pudieras ejecutar de forma automatizada un contrato a cualquier altura de la cadena de un proyecto de construcción generando un documento tan válido como el tradicional, evitando los tradicionales conflictos que se generan en torno al mismo y configurando un ecosistema en torno a él ligado a ese proyecto y a un grupo de interventores con la máxima seguridad y trazabilidad posible.
Pues no imagines demasiado porque no está solo en tu mente. Existe y se llama Smart Contract o Contrato Inteligente.
Los Smart contracts son, de hecho, una de las aplicaciones más interesantes (para cualquier industria) que ofrece la tecnología Blockchain, facilitando, entre otras cosas:
- Una gran seguridad, trazabilidad e inmutabilidad de las transacciones.
- Un control de la transferencia de activos en Blockchain.
- Una garantía de que cada uno de los cambios deben estar sujetos a condiciones predefinidas.
Smart Contracts: definición y origen
En los Smart Contracts, todas las partes que intervienen en esa rúbrica pueden establecer sus responsabilidades y penalizaciones por incumplimiento, liberándose del pago única y exclusivamente si se han dado determinados requisitos previamente establecidos.
La clave de estos contratos, que emanan de la tecnología Blockchain, es su ejecución automática, su seguridad y la transparencia con la que se van registrando los movimientos a cada paso que damos en torno al mismo.
En cuanto al origen, te interesará saber que el término Contrato Inteligente fue pronunciado por primera vez en la historia por Nick Szabo, académico, criptógrafo y científico informático que estableció su definición en 1996 de la siguiente manera:
“Un conjunto de condiciones establecidas, que en el momento donde se cumplen esas condiciones, se ejecutan inmediatamente unas. Los protocolos generalmente se implementan con programas en una red informática o en otras formas de electrónica digital, por lo que estos contratos son “más inteligentes” que sus antecesores en papel”
Siguiendo con el desarrollo del origen de los Smart Contracts, cabe destacar que tras esta definición, uno de los pioneros de Ethereum, Vitalik Buterin, puso el foco en dicha tecnología para abordarla desde Blockchain.
Cómo aplicar los contratos inteligentes al sector
Aunque hemos hablado en numerosas ocasiones del potencial de Blockchain en la construcción y, más en particular, como compañero perfecto para BIM en la evolución del sector, lo cierto es que en términos realistas, los Smart Contracts son, de momento, lo único que se ha materializado.
Precisamente en el sector de la construcción, la posibilidad de automatizar contratos facilitaría mucho las cosas en términos legales y de seguridad entre las partes.
Es perfectamente compatible con la Metodología BIM y la clave de los Smart Contracts en construcción es que garantiza un importante principio de neutralidad creando certificaciones válidas y reglas de negocio que pueden ser compartidos a través de BIM.
Además, en términos generales en el sector, los contratos inteligentes tendrían interesantes aplicaciones en:
- Gestión de Pagos
- Project Management
- Gestión de la Cadena de Suministro;
- BIM y Smart Asset Management
3 Ventajas de los Smart Contracts en la construcción
- Transparencia: cada uno de los movimientos que se ejecutan en torno a un proyecto a través de un Smart Contract está al alcance de todos los interventores del mismo, quedan registrados y no son anulables.
- Gestión de Riesgos: pueden llegar a evitar los riesgos más típicos de los proyectos en construcción, tales como los retrasos, el incremento de los costes, problemas en los pagos, conflictos legales o incluso la reducción de la rentabilidad de los mismos.
- Certificación y conformidad: como parte del contrato inteligente, puedes añadir las normas, códigos y estándares contractuales además de otro tipo de información relacionada con el proyecto, de forma que registras de forma certificada y trazable dentro de Blockchain todos los datos relativos a ese Smart Contract.